SELVA NEGRA Y CASTILLOS DEL RHIN (2008)

4 AMIGOS, UN VUELO BARATO, UN COCHE DE ALQUILER...
Y UN MUNDO POR DESCUBRIR!!!
Del 17 al 26 de Marzo de 2008


Introducción y preparativos


En vista del éxito de la Semana Santa del año anterior, decidimos repetir compañeras de viaje: Txus y Eider. Este año Josema se había ido a currar a Alemania y le dijimos que íbamos a ir a verle.


Ahora tocaba buscar vuelos… lo más barato que encontramos fue a Frankfurt Hahn, que es un aeropuerto militar que está a 100 km de Frankfurt, así que compramos los vuelos y nos pusimos a buscar sitios de interés por los alrededores.


Para nuestra sorpresa había un montón de opciones “cerca”, barajamos la Selva Negra, Lago Constanza, Cataratas del Rin, Baviera con su Ruta Romántica y su pedazo de castillo del Rey Loco (esto queda pendiente para otra vez), castillos del Rin, del Mosela… demasiadas opciones para pocos días, había que elegir!


Después de juntarnos a decidir y con toda la información sobre la mesa, nos quedamos con la Selva Negra y los Castillos del Rin, por cercanía al aeropuerto, lo demás tendría que esperar.


Dividimos los días entre las 2 zonas, cogimos 2 casas como campamento base y reservamos el coche de alquiler.


El viaje ya estaba en marcha!!!


DIA 1. Llegada a Frankfurt y... a Durbach!!
Como Ryanair había quitado este destino de Biarritz, tuvimos que ir hasta Santander a coger el avión. Dormimos la noche anterior en Bilbao en casa de Txus y por la mañana cogimos el Pesa hasta Santander y allí mismo el bus urbano que va al aeropuerto. Todo muy fácil para llegar.


Llegamos a Alemania sobre las 3 de la tarde, recogimos las maletas y fuimos a Europcar a por nuestro coche de alquiler. Un señor de la compañía nos montó en una furgo y nos llevó al pueblo que hay al lado del aeropuerto y ahí recogimos el coche.


Volvimos al aeropuerto y comimos en un restaurante que hay en la parte de arriba, que conocíamos del año pasado y nos había gustado y nos pusimos rumbo a Durbach, el pueblecito de la Selva Negra donde teníamos nuestra primera casa.


250 km más tarde y ya de noche, llegamos hasta la puerta de la casa sin ningún problema, gracias a nuestro GPS.
La dueña nos estaba esperando, sólo hablaba alemán así que llamó a su hija para que nos tradujera (en inglés) y nos enseñó la que iba a ser nuestra casa los próximos 4 días.


Nuestro apartamento estaba en una casa de 3 pisos: en el 1º viven los dueños, en el 2º su hija y el ático es el que alquilan.


Era super chulo!!!, todo de madera y muy nuevo. Nada más entrar, nos encantó! Qué buena elección habíamos hecho. Era incluso más bonito que en las fotos de la web y muy, muy espacioso. Desde una de las habitaciones se veía la catedral de Estrasburgo (a 30 km) y desde la otra todo Durbach.








DIA 2. Nos vamos a Europa Park!!!


Nos levantamos y vimos que hacía un día buenísimo, así que después de pegarnos un super desayuno, nos fuimos a Europa Park!



Creo que es el parque temático más grande de Alemania y la verdad es que está super bien.












Las zonas son países europeos y los decorados son muy chulos, me gustaron especialmente las casitas de Suiza.





Y nada más acercarte a la entrada, empiezas a escuchar esa musiquita... Uauuuu!!! Disfrutamos como niños! o más!! jejeje, si hasta Eider con todo el vértigo que tiene, se montó en una torre que iba dando vueltas despacito mientras subías, para ir viendo el paisaje!






Txus y Eider se montaron en casi todo con nosotros, pero se perdieron lo mejor! una montaña rusa enorme, que salía del parque e iba por encima del parking y luego volvía. La primera bajada es una pasada! Impresionante!!


Las atracciones de agua tenían muy buena pinta, pero aunque nos salió un día buenísimo, la temperatura no era como para mojarse, qué se le va a hacer!





Vimos algún que otro espectáculo y muy bien, sobre todo uno de gladiadores.


No había mucha gente, así que montamos en todo lo que quisimos sin apenas colas, nos lo pasamos super bien!! Cómo me gustan los parques!!


Oleeeee!! jejeje



Cómo nos lo pasamos!! Tenemos que posar con todas las figuritas que encontramos!





Esta es la "bajadita" de la montaña rusa que sobrevuela el parking!



Cuando nos cerraron a las 18h, nos fuimos a Friburgo a dar una vuelta para ponernos un poco en situación y estuvimos paseando alrededor de la Catedral, pero hacía mucho frío, se nos había hecho de noche, estaba desierto… (sobre las 8 de la tarde) y nos metimos en un Starbucks. Mi gran debilidad es el chocolate y esa tarta de chocolate es… ummmmmmmmmhhhhhhhhhhh!!! Qué vicio!!!






DIA 3. Un poquito de Alsacia


Nada más llegar a Estrasburgo, aparcamos cerca de la Catedral y estuvimos dando una vueltilla por allí.








Cogimos un plano en la oficina de turismo y callejeamos por la Petit France. Es alucinante!!! Qué bonita! Qué casas tan chulas!!













Llevaba toda la mañana cayendo agua nieve, pero llegó un momento en el que se puso realmente desagradable y decidimos montarnos en el coche y dirigirnos a Colmar, a ver si mientras llegábamos y comíamos, se despejaba un poco.
Nos hubiera gustado dedicarle algo más de tiempo a Estrasburgo, que nos quedamos algo cortos, pero el tiempo no ayudó demasiado, así que nada, otra vez será.













Después de comer tuvimos suerte y la tarde nos aguantó sin llover, así que guay!


Hicimos andando 2 rutas turísticas que venían marcadas en el plano, qué bonito es Colmar!! Callejeamos un ratito más, estuvimos por la Petit Venice y nos fuimos a Riquewhir.













Es tan bonito, que sobran las palabras!











Si Estrasburgo nos había gustado, Colmar no se quedó atrás y Riquewhir… pueblito de cuento!!! La calle principal parece un decorado de película o una zona de un parque temático. En las fotos no se aprecia lo bonito que es, mucho mejor in situ! Y se ve enseguida, que es muy pequeñito, merece la pena acercarse.











Merendamos unas crepes buenísimas es una crepería de la calle principal, y es que claro, estar en Francia y no comer crepes es un delito! y más para nosotros, que no somos casi golosos...


De ahí fuimos al castillo Haut Koenigsbourg, lo habíamos visto desde la autopista y tenía buena pinta, así que subimos por una carreterita llena de curvas. Ya era de noche y hacía un frío… Al llegar arriba estábamos a -5º. Así que bien abrigaditos dimos una vuelta alrededor del castillo (que estaba cerrado), sacamos unas fotos y nos fuimos antes de quedarnos congelados.








Me gustó todo lo que vimos de la Alsacia, qué ciudades y pueblos más bonitos!!! Igual le habría dedicado un día más, pero era lo que había...




DIA 4. Un poquito del Sur y... Triberg!!!


Pasamos la mañana en Friburgo y no tenía nada que ver con el Friburgo que vimos de noche: las calles estabas llenas de gente, en la plaza de la Catedral había un mercado muy animado… fue algo que nos llamó mucho la atención en todos los sitios en los que estuvimos: a partir de las 18h la gente desaparecía y las calles se quedaban desiertas.





A mediodía empezó a nevar… y ya no paró en todas la vacaciones.
Pero estábamos encantados con la nieve, que no moja como el agua y además no estamos acostumbrados a ver nevar así!







Comimos en un Nordsee, que es una cadena en la que puedes comer pescado rico y a buen precio. Plato de pescado rebozado con champis y queso + patatas + bebida = 8€ más o menos. Había varios platos para elegir.






Y luego fuimos a Titisee. No le encontramos mayor atractivo, a parte del lago lleno de patitos. Me imagino que en verano será otra cosa (por lo de poder bañarte).
Eso sí, el paisaje que recorre la carretera por la que fuimos es una pasada! Super, super bonito!!


Tomamos algo para entrar en calor y nos acercamos a Donau Eschingen (donde supuestamente nace el Danubio), pero como el tiempo se nos echaba encima, ni paramos y nos fuimos directamente a Triberg a ver la cascada.




Aparcamos en la parte de arriba del pueblo, al lado de una iglesia pequeñita preciosa, nos empezó a nevar con unos copazos…





Seguimos las indicaciones para llegar a la cascada y flipamos!!! Ohhhhhhhhhh!!! Qué bonito!!!! Qué pasada!! Uauuuuuuu!!!



Bajaba un montón de agua, el ruido era ensordecedor (pero guay), nevaba un montón, estaba cuajando… un marco incomparable!!




Para mí, esta es LA FOTO del viaje.



Fue, sin duda, lo mejor del día.





Allí estábamos los 4 bajo la nieve, hipnotizados por la cascada y alucinados. Subimos por un lado, bajamos por el otro, cruzamos las pasarelas… una gozada!
Y además se nos hizo de noche y estaba iluminada!





No sé cuánto tiempo estuvimos allí, estábamos flipadísimos y con la boca abierta!! Qué sensación! No notábamos ni el frío, vamos.


DIA 5. Un poquito del Norte y... mucha agua!!!


Habíamos quedado en Baden Baden con Ari y Josema, que estaban cerca. Todo el camino hasta allí estuvo lloviendo y en cuanto nos bajamos del coche buscamos un sitio para refugiarnos, pero no era plan quedarse en los pórticos todo el día…


Así que dimos una vuelta rápida por el centro: vimos el Ayuntamiento (Rathaus), las termas de Friedrich y Caracalla, la iglesia, el casino, escaparates con unos precios prohibitivos…








Como no paraba de llover nos metimos en una cafetería a tomarnos unos schocolade mit shane (cola caos con nata), que estaban buenísimos en todos los sitios, para entrar en calor, hacer un poco de tiempo y de paso forrarnos los pies con papel higiénico, que ya los teníamos mojados y que vaya rallada que tenía Txus… buff! Sin comentarios!.


En vista de que no tenía pinta de parar, nos lanzamos a la calle… y nos volvimos a empapar!! Así que volvimos al coche, que de todas formas Baden Baden no nos estaba gustando demasiado… Vaya tiempito!!


De camino a Oppennau cogimos un atasco, era el primer día de las vacaciones de Pascua de los alemanes y habían salido de casa todos a la vez. Eran las 16h cuando llegamos y no sabíamos si nos iban a dar de comer. Vimos una pensión restaurante y allí entramos a preguntar y nos dijeron que sin problema.
Además hoy teníamos traductor, que Josema ya controlaba, así que guay!. La señora era super maja y aunque a veces no nos entendía nos sonreía todo el rato, qué graciosa! Hasta nos sacamos una foto con ella!



Nos sacó un poco de todo (comida casera y típica alemana) y estaba buenísimo. 6 platos, 2 rondas de cervecitas y fantas y postre = 100€ (6 personas) y creo que esto fue lo más caro que pagamos en comer en todos los días que estuvimos. Alemania nos pareció muy barato para comer y para comprar. Compramos naranjas de Valencia y fresas de Huelva más baratas que aquí!!


Y aquí vivimos una situación surrealista… le dijimos a la señora que a ver si podíamos fumar y nos dijo: “aquí se come y allí se fuma”, señalando una habitación cerca de nuestra mesa y que tenía la puerta abierta. Pues allá que fuimos!


Era frikilandia!!! jajaja, lo que nos pudimos reir!! Había un par de señoras con unas pedazo jarras de cerveza que flipas y raras como ellas solas! Y al momento entró otro del mismo palo y se sentó con ellas, jajaja, nos meábamos!!! Si hasta grabamos videos y todo!!






La intención era ir a la cascada de Oppennau, pero nos fue imposible porque no pudimos aparcar el coche. A medida que íbamos subiendo por la carreterilla, nevaba con más fuerza. Cuando llegamos a la altura de la cascada había una capa de nieve que nos llegaba hasta las rodillas y no llevábamos cadenas. La carretera estaba limpia, pero no era cuestión de parar en medio de la carretera ¿no?. Así que nos dimos la vuelta donde pudimos y dimos un paseo por el pueblo para bajar la comida.





Durante el paseo, encontramos unas bolsitas de plástico para recoger la mierda de los perros... esto era mejor que el papel higiénico que llevábamos en los pies... cogimos un par de ellas cada uno y nos las guardamos por si nos hacían falta en otro momento.


De ahí fuimos a Oberkirch, donde sólo vimos la iglesia y la plaza y otra vez a tomar algo para entrar en calor, y ¿qué mejor que unos heladitos?, sí, nos metimos en una heladería...





DIA 6. Heidelberg y… vaya susto!!!


Ese día tocaba cambio de casa, así que recogimos todo y bajamos a pagarle a la señora. Es una pasada lo agradables que son y lo que se fían de la gente, para reservar no nos habían pedido nada y cuando llegamos tampoco. Hoy nos hizo de traductor su hijo el buenorro y además tenían ganas de conversación, ahí andábamos Txus y yo sonriendo como gilipollas a toda la familia que querían saber qué habíamos hecho estos días, si nos había gustado… ellos le preguntaban al hijo en alemán, el nos traducía a inglés, nosotras contestábamos y él les traducía, así estuvimos un rato!! Qué listos Miguel y Eider, cómo se escaquearon!!


Nos despedimos y nos fuimos a Heidelberg, que habíamos vuelto a quedar con Ari y Josema.


Subimos al castillo dando un paseo, aunque vimos que también se podía subir en funicular.


Vale sí, echamos moneditas a la fuente como si estuviéramos en la Fontana di Trevi, pero total, "qué más da!, si no nos conoce nadie..." Esta es una de nuestras frases de vacaciones...



El castillo es super chulo, se puede entrar, pero nosotros sólo lo vimos por fuera.




Venga, que ahora salimos los 6!








y estuvimos viendo la ciudad desde allí. Vaya vistas!!! Son una pasada!!!







Bajamos por el otro lado y fuimos hacia el puente para cruzarlo y ver el castillo desde el otro lado del río.


Mirad a Txus al fondo tomando el sol, jajaja.







Volvimos y nos metimos en el centro para ir viendo el casco, hay mogollón de iglesias a cada cual más bonita. Y así, paseando, nos dio la hora de comer...



En esta iglesia había un coro ensayando, qué pasada cómo cantaban!!



Queríamos comer codillo que todavía no lo habíamos probado y como no sabíamos cómo se decía, nos metimos en una librería para buscarlo en un diccionario, no lo encontrábamos y pasamos a los libros de recetas… 6 personas, dentro de una librería de la calle principal (Haupstrasse), mirando recetas… Todo un espectáculo!, jajaja. Y después de todo lo que buscamos encima no lo encontramos…


Entramos en un restaurante (Perkeo) y vimos que en una mesa estaban comiendo codillo, así que señalando disimuladamente la camarera nos entendió. Estaba asado, con la piel super crujiente, acompañado de 2 bolas de puré de patata y berza. Plato: 7,50€ y cerveza o fanta: 3,50€.


Por la tarde seguimos descubriendo la ciudad. Habíamos visto una torrecita en el monte, en frente del castillo, en el otro lado del río y subimos.


No había nadie y se puede subir a la torre para admirar las vistas de la ciudad y del castillo. Es lo único que queda en pie de un castillo (hay un cartel con el plano de lo que fue).




A las 20:30h, decidimos que ya era hora de irnos y nos despedimos de Josema y de Ari. Nos montamos en el coche, sacamos el GPS y el mail de la 2ª casa y… sorpresa!!! No teníamos dirección, ni teléfono… vaya rato!. Estábamos a 120km de Erbach, era de noche, nevaba un montón y no sabíamos dónde estaba la casa! Aquí la lista de turno (o sea yo), no se había dado cuenta!


Llamamos a Txume, esperando que tuviera el ordenador a mano y pudiera entrar en la web de la casa, pero lo estresamos entre todos y no acertaba…


Mientras tanto nos pusimos en camino y por fin pudo entrar y darnos la dirección… Ufff!!! Qué momentazo!


Llegamos y nos estaba esperando un chico (el hijo de los dueños) para llevarnos a nuestra casita. Es una casa independiente de 2 pisos, se alquilan los 2 pero en el de abajo no había nadie. Totalmente recomendable.
Encima de que llegábamos tarde, el chico todavía tenía ganas de conversación y nos preguntó hasta por el temporal de Donosti!!


Aquí en nuestra posición habitual nocturna...





DIA 7. Frankfurt, Wiesbaden y… relax!!


Nos levantamos, abrimos la ventana y… ohhhh!!! Estaba todo nevado! Qué bonito!!!



Mientras desayunábamos sonó el timbre de la puerta y cuando abrimos, allí estaban la dueña de la casa y su hijo, con un plato de regalo de bienvenida. Sí, sí, como en las pelis! Nos quedamos alucinados!


Le pagamos para no tener que andar buscándoles el último día y nos dijeron que cuando nos fuéramos, dejáramos las llaves dentro y ya está. Si ya os he dicho antes que se fían mogollón!! Solíamos decir de coña que era imposible que fueran tan agradables y tan risueños, que seguro que eran de los que te sonreían por el día y venían por la noche a descuartizarte, jajaja.


Pasamos la mañana en Frankfurt, paseando por el centro. El Romer es super bonito!! Sí ya sé que no es la plaza original, que se reconstruyó en 1986, pero me da igual, me encantó!!







Aquí nuestras reporteras, jejeje.



Anduvimos por las calles peatonales, vimos la catedral, que para variar tenía andamios, fuimos hasta el río Meno (Main), estuvimos por la zona financiera…





Nos gustó el contraste de los rascacielos con la parte más antigua.




Al ser Domingo, la ciudad estaba casi desierta y casi todo cerrado. Me imagino que ver el ajetreo en un día laborable tiene que ser diferente.
Y como no encontramos mucha oferta para comer, entramos en un Mc Donald’s , que ya estábamos tardando…




La ópera.



Por la tade estuvimos en Wiesbaden. Es más… imperial? Totalmente diferente a lo que habíamos visto hasta el momento.


Partimos del Ayuntamiento, al lado de la catedral, cogimos la calle peatonal y callejeamos un rato. Tampoco es que nos gustara demasiado, así que en cuanto vimos una heladería, entramos y nos comimos unos gofres, que no sabían mucho a gofre, pero bueno.



Como la oficina de turismo estaba cerrada, nos metimos en un hotel, con todo nuestro morro, para preguntar dónde había termas. La recepcionista nos miraba alucinada, pero muy amablemente nos dio un plano de la ciudad y nos indicó.


Las termas no eran nada del otro mundo, pero a nosotros nos gustaron y además nos parecieron baratísimas (8,50€ todo el día).
Lo que más nos gustó fue la sensación de bañarte en la calle, cuando la temperatura exterior era de -2º (no habíamos probado nunca). Qué guay!!!


Y así, relajaditos, nos fuimos a casa.


DIA 8. Un poquito del Rhin y… el Burg Eltz!!!


Fuimos hasta Bingen am Rhein para empezar nuestro recorrido por la orilla del Rhin.


Desde Bingen hasta Bacharach fuimos parando a hacer fotitos, pero sin detenernos demasiado. Estuvo nevando todo el día y el cielo tenía ese color de nieve con el que es imposible sacar una foto decente.





Callejeamos un rato por Bacharach: seguimos un riachuelo y pasamos por debajo de las murallas, vimos el castillo y lo que queda de iglesia desde abajo… una gozada de pueblo! Parece el de Shrek!!!











Me encantan las casitas de entramado de madera y el pueblo me pareció super bonito.





Seguimos por la orilla del Rhin, haciendo paradas y viendo castillos...




En St. Goar había mercado y estuvimos dando una vuelta (por el mercado y por el pueblo) y comimos en un italiano una pasta buenísima.




Y después de comer, el cielo nos dio una tregua...



Sacamos unas fotos al castillo, a St Goarhausen (el pueblo de enfrente) y su castillo… y seguimos rumbo a Rhens, haciendo alguna breve parada por el camino.



Rhens, otro pueblo super bonito!




A parte de las casas, me gusto esta fuente tan curiosa



De ahí fuimos directamente hasta el Burg Eltz, tardamos un poquillo en llegar, por una carreterilla que iba por el monte, pero mereció la pena. IMPRESIONANTE!!! Y el paisaje nevado, salpicado de pueblitos de postal navideña por el que nos llevó la carretera también. Es una pasada los paisajes!!! Vayas por donde vayas son super bonitos!!


Llegamos justo a las 17:30h (hora de cierre), así que no pudimos entrar, pero sólo estar allí mereció la pena.




Después de un rato allí, empezó a nevar super exageradamente.



Corrimos hasta el coche y nos fuimos a Beilstein, un pueblecito muy pequeño con mucho encanto, a orillas del Mosela.





En cada rincón encontrabas un sitio bonito.



Para acabar el día fuimos a Cochem, del que ya no vimos gran cosa porque era de noche y hacía un frío…







Paseamos un poquito por el centro, cruzamos el puente para ver la ciudad y el castillo iluminado desde el otro lado y nos metimos en una heladería a comernos unas copas enormes… nuestra dosis de dulce diario, jejeje. Menuda forma la nuestra de entrar en calor!




DIA 9. Otro poquito del Rhin y… el cumple de Eider!!!


Había nevado más que ningún otro día y había una capa de nieve impresionante. Estábamos sacando unas fotos en la puerta de casa, cuando pasó un señor y se paró a hablar con nosotros. Son super sociables y hospitalarios, nos dijo dónde vivía por si necesitábamos algo y hasta nos preguntó por la situación politíca en Euskadi!!




Cuando salimos de casa, alguien nos había limpiado el caminito hasta el coche ¿?? Suponemos que los dueños, pero no vimos a nadie. Flipamos!!


Le quitamos al coche toda la nieve de encima y fuimos directos a Coblenza.


Parece que el tiempo sabía que era el cumple de Eider y hasta vimos el sol y todo!!






Estuvimos en la esquina donde se unen el Rhin y el Mosela, cómo soplaba el viento... qué frío!!!





Y paseando por la ciudad hasta que nos dio la hora de comer. Repetimos Nordsee que nos había gustado, compramos unos regalitos para nuestro sobri y nos fuimos.





Esta vez bajamos por la otra orilla del Rhin (desde Coblenza hasta Rudesheim am Rhein) para disfrutar del paisaje desde el otro lado, parando de vez en cuando.
La verdad es que es muy bonito, los valles del río salpicados de pueblitos y de castillos…




Dimos una vuelta rápida por Rudesheim


Y nos fuimos a Mainz (Maguncia). A parte de la catedral no vimos mucho más. Cuando cae la noche y el frío aprieta…


Nos metimos en una bar muy curioso a tomar algo. Tenía una cristalera super grande y un banco larguísimo lleno de cojines pegado a ella, y el mejor cola cao con nata de los que habíamos probado en todo el viaje, que fueron unos cuantos.




DIA 10. La vuelta y… mi cumple!!! Hoy sí que hay nieve!!
Me levanté mi último día en Alemania con un año más, uff!! Pensábamos que ya habíamos visto toda la nieve que había que ver, pero no! Esta mañana había más y nevaba más que nunca.


Fuimos al aeropuerto Hahn, que estaba a 40km de nuestra casa, despacito, que nevaba mogollón, dejamos el coche en el parking (15 minutos gratis) y después de facturar las maletas, fuimos a devolverlo donde lo habíamos cogido. Ahí tuvimos uno de esos momentos bocazas que nos caracterizan… había una pareja dejando el coche y la chica iba con los riñones al aire y enseñando tanga con el frío que hacía, pensábamos que eran ingleses y empezamos “alguien va a perder el vuelo…”, “se le ve la hucha” y cosas por el estilo. Cuando nos montamos en la furgo que nos iba a llevar al aeropuerto, la chica nos habló en castellano como para cortarnos la coña, jajaja, flipamos!!, pero qué hicimos entonces? Ponernos a hablar en euskera… ilusos!!! El chico fijo que era bilbaíno, voló con nosotros hasta Santander, cogió el bus hasta Bilbao y todavía le vimos en el metro y no llevaba ni plano ni nada, jajaja y nosotros diciendo que total, la jerga no la habrían entendido y nos entendieron hasta en euskera!!


Ya en el aeropuerto tuvimos otro momento de estos… si es que no aprendemos! Había una pareja hablando entre ellos en alemán, que se estaban poniendo tibios a cervezas y empezamos “mira estos nos van a hacer la del Melendi”, jajaja. El vuelo se retrasó 20 minutos por la nieve que estaba cayendo y los Melendi seguían bebiendo y nosotros todo el rato con la coña. En una de estas, se nos acercó la chica y nos preguntó en perfecto castellano que a ver si sabíamos a qué hora salía el vuelo… planchados nos quedamos!! Jajaja, si es que somos un poco bocas, qué se le va a hacer…


El vuelo sin problemas, pero justo antes de aterrizar, hacía mucho viento y el avión dio algún que otro bandazo. Había que ver la cara de Eider intentando frenar su vértigo y mirándole con cara de asesina a Txus, que con los nervios se reía y decía “vamos a morir”, jajaja.


Para terminar el día y celebrar los cumpleaños en condiciones nos acercamos a Portugalete a comer unos churros con chocolate.