jueves, 30 de septiembre de 2010

BODA (2010)

MI VERSION DE LA BODA
22 de Mayo de 2010


Después de tantos años viviendo juntos, te acomodas y como que no encuentras el momento de casarte. Nuestro momento llegó y ya sabéis que fue una “pedida” un poco atípica, pero estábamos super contentos y había que celebrarlo a lo grande y con todo el mundo!


Vale sí, le engañé… estaba anestesiado y me aproveche de él, jajaja.
Y menos mal que estaba Marian de testigo, que si no igual se echa para atrás alegando que no estaba en plenas facultades!. Pero ya no había vuelta atrás!


Uy! Si el 22 de Mayo era Sábado… pues ya está! Nos casábamos el mismo día que hacíamos 12 años juntos y nos ahorrábamos una fecha.


Quedaba casi año y medio y cuando nos quisimos dar cuenta había llegado el día. El tiempo pasa volando!


Cómo contar con palabras todo lo que puedes llegar a sentir… es complicado, muy complicado, pero lo voy a intentar.


Me levanté a las 7 y ¿sabéis qué?, las calles estaban puestas y era de día!, qué cosas descubre una…


Había estado todo el mes lloviendo y haciendo un frío que te cagas y vaya día salió!, qué solazo y qué calor!, increíble!!.


Vino mi padre a buscarme a la peluquería y entre mi madre y él me ayudaron a vestirme, parecía que de momento estaban tranquilos, aunque con los 50 mil botoncitos que tenía el vestido, tuvo que terminar de atármelos Javi cuando vino a traerme el ramo.


¿Ese era mi ramo?, qué pasada!!!, era mucho más bonito que cuando lo elegí!


A las 9:30 vino Miguel a buscarme, que habíamos quedado a las 10 con el fotógrafo y bufff!!!, no voy a olvidar su cara de flipado nunca!!, ya sabéis que no sabe disimular y si no le gusta o le gusta algo enseguida se le nota… bueno, pues su cara me decía que le encanté! jajaja. Él estaba guapísimo, por supuesto, qué voy a decir yo!


Al llegar a Miramar, no sé qué habría, pero había mogollón de policía y no nos dejaron aparcar, así que Miguel se fue a buscar sitio y yo me quedé allí esperándole y mientras, la gente que pasaba me iba dando conversación.


Mientras esperábamos al fotógrafo nos estuvimos echando risas, estábamos suuuuper tranquilos y ya cuando vino, ni os cuento!. Era bastante personajillo y hacía mogollón de muecas, así que estábamos todo el rato partiéndonos el culo!


Después de la sesión, Miguel me volvió a dejar en casa de mis padres y se fue a buscar a su madre para esperarme en la iglesia.


Nos recogió Javi a mi padre y a mí en el pedazo de coche que había restaurado y como andábamos sobradillos de tiempo ( nos casábamos a las 12) y no era plan llegar antes que los invitados, nos estuvimos dando unas vueltillas por el barrio para hacer tiempo mientras íbamos saludando al personal… jajaja, ni la Leti!


 Ya sabéis que soy super tranquila, pero pensaba que igual al llegar a la iglesia, al ver a todo el mundo esperando, me pondría nerviosa… pues para nada!! Al contrario, qué sensación ver ahí a toda tu gente esperándote!



Hice un amago de salir por la puerta que no “debía”, está claro que el protocolo no es lo mío y después de un ratillo allí plantados, entramos en la iglesia. Menos mal que los de la pancarta se acababan de largar cuando yo llegué, jajaja.



Qué guapos estaban mis niños y qué bien se portaron!!


Cuando entramos, mi padre, el pobre, llevaba un sofocón que pa qué y yo iba tranquilizándole, menos mal que el cura es un crack y consiguió que se le pasara.


Yo le había dicho al cura que no quería subir al altar porque me daba vergüenza, pues anda que no lo pasaba mal ni nada cuando tenía que exponer en clase, pero él me dijo que sí, que quedaba más bonito y la verdad es que estuvo guay ver a todos ahí sentados (bueno, a los que no estaban en el bar de enfrente, jajaja)


Y llegó el momento de los anillos… estaba claro que el de Miguel no le iba a entrar, ya le dije que se lo cogiera un poco más grande. Así que cuando se lo fui a poner y vi que no le entraba me entró la risa (a punto estuve de que me diera mi ataque de risa que luego no puedo parar) y al final se lo puse en la otra mano.


Nos encantó la ceremonia!! Ni corta ni larga y super amena, vamos, que hubo gente que no conocía al cura que se acercó a felicitarle y todo!


Mientras estábamos dentro, había gente fuera dedicándose a esto:


Ya estábamos casados y tocaba salir… Miguel me dijo que me pusiera el ramo en el escote para que no me entrara arroz, pero vamos, que cuando me quité el vestido tenía arroz hasta en las bragas!!! De verdad, que podía haber hecho una paella!


Arroz, pétalos y… ¿balones?, ¿eso que nos caía eran balones?, jajajaaaaa, qué bueno!!.


Luego nos contó Marian que lo de los balones se le ocurrió por si Miguel se ponía nervioso y ya sabemos todos que en cuanto ve un balón se olvida de todo… pues 30 balones nada más y nada menos!


 Mi ramo no aguantó el bombardeo y perdió las 2 florecillas de abajo, pero no me extraña! jajaja.


¿Cuántos besos se pueden llegar a dar en un momento??, buff!!


Nuestro coche nos estaba esperando… Después de un rato desenvolviéndolo, me cayó como por arte de magia una navaja en la mano, así era mucho más fácil, dónde va a parar!


Y como de una boda sale otra boda, Urko y Lara estuvieron haciendo migas…


Cuando terminamos de desenvolverlo, los buses todavía no habían llegado. ¿Para qué nos llamó 50 veces durante la semana para confirmar horarios?, pues no sé, porque ya había pasado media hora y todavía no estaban… Nos acercamos al parking de Oleta a ver si estaban allí y después de unas llamadas por fin aparecieron, pero vamos, qué poca formalidad!


Y ahí fue la 1ª vez que me vi vestida de novia porque se me había olvidado mirarme al espejo antes de salir de casa! Miguel me sacó una foto con el móvil para que me viera y qué guapa me vi! jajaja.


Qué guay estuvo el lunch en el jardín!, bueno, nosotros no probamos nada así que no sabemos si estaba bueno o no, pero el sitio es super bonito y ahí nos estuvimos sacando las fotos de grupo, achicharrándonos de calor.





Y ahora ya tocaba entrar a comer. El brindis lo hicimos con mosto con gaseosa ¿a que daba el pego?. Nos sentamos y mirábamos a la gente y decíamos: toda esta gente ha venido por nosotros… qué fuerte!


Tuvimos ahí un momentillo delicado, porque una niña se había enfadado y se había escapado y Miguel salió a buscarla, y la gente que no se había enterado gritaba “que se besen” y yo sonreía y pensaba, “sí, sí, cuando vuelva Miguel”, jajaja.


Y mis primos empezaron a cantar ramos… Es una costumbre de mi pueblo, que te pinchan en el tenedor comida, te ponen dinero, te cantan y tienes que ir donde ellos y comerte lo que han puesto. Luego ya se fueron animando mis tíos y los amigos del pueblo, al final cantaron hasta unos amigos de aquí y todo! Estuvo guay!


Y así fue pasando la comida… comíamos, nos levantábamos a ver qué tal la gente, nos volvíamos a sentar… estábamos super a gusto!




Tenemos pruebas gráficas de lo que le pasó a la fuente, jajaja, qué pobre el niño de mi primo, que le ofrecieron 10€ por cruzar por encima y se empapó cuando se rompió.


Se iba acercando la hora del postre y empezamos a mirar los recorridos para la entrega de los novios y del ramo, al final le dije a Miguel que fuera por donde quisiera y que yo le seguía. No hubo dudas en ningún momento de para quiénes eran, desde el principio teníamos claro que los novios se los íbamos a dar a Javi y Sheila y el ramo a Txus. Lo que sí estuvimos pensando es en hacerle algo a los otros 2 hermanos, pero al final, por no liar más la manta, lo dejamos así.


Cortamos la tarta nupcial, se nos olvidó darnos el beso de rigor...


y allá que fuimos con los novios al ritmo de “Alegría” del Circo del Sol…


Qué pobre Sheila!, qué sofocón se llevó! Y aunque Javi se haga el duro, yo sé que también se emocionó. A Miguel se le saltó alguna lagrimilla y a mi poco me faltó, pero claro, es que yo soy tan dura como Javi o más, jajaja.


Y ahora a por el ramo al ritmo de Shakira!

Otra que se llevó un sofocón!! Y por lo visto, Txus no fue la única, que acabó llorando toda la mesa… Yo como veía que me iba a poner a llorar salí por patas de allí!


Mientras estábamos repartiendo los regalos y los puros, mi cuadrilla andaba en otras cosas… Nos pusieron en la mesa nupcial 2 globos con forma de corazón (ñoños como nosotros, claro), con una foto de cada uno de nuestras despedidas, qué cabrones!! Y una postal que no pude terminar de leer porque se me hizo un nudo en la garganta…


Nosotros no nos dimos cuenta de nada y nos tuvieron que decir que fuéramos para allí y luego nos llamaron para darnos nuestro regalo… oooohhhhh!! Qué pasada!! Vaya curro! Un centro de flores hecho con billetes! Nos gustó mogollón! Bueno y a los demás, que se levantaron a hacerle fotos y todo!


Y le di mi liga a Ari que se casaba en Agosto, me la habían regalado en la despedida y como yo era la 1ª de la cuadrilla que se casaba, me hacía ilusión que fuera pasando por todas.


Y así nos dio la hora del vals… ¿vals?, ¿qué vals?, bailamos una de Bryan Adams super chula!. No es un secreto que no somos muy bailarines, de hecho, era la 1ª vez que bailábamos juntos, así que habíamos quedado con los de la orquesta en que en cuanto el fotógrafo nos sacara 4 fotos, llamara a la gente para que entrara a bailar. Y fue bastante mejor de lo que esperábamos, porque entre que Miguel me decía que qué guay que el vestido le tapaba los pies y unas cosas y otras, nos entró la risa y estuvimos todo el rato partiéndonos.


Entraron mi padre y mi suegra a bailar con nosotros y mi padre me hacía pararme cada vez que veía una cámara para posar. Y mi madre consiguió enganchar a Miguel antes de que se escaqueara, jajaja.


Y ya empezó el baile normal, qué forma de bailar y de sudar!!! Nos encantó la orquesta, eran muy muy buenos!


Aguanté como una campeona con los tacones hasta este momento, pero ya era hora de cambiarse y de recoger la cola, que era un coñazo. Pero como pesaba tanto no hubo forma de sujetarla en condiciones, así que acabé con la cola echada al hombro.


Les habíamos dicho que no nos hicieran ninguna de estas de los novios tienen que hacer tal o cual, porque con el primer baile teníamos más que suficiente, sobre todo Miguel, que al final me sorprendió porque bailó más veces a lo largo de la tarde. Y en una de estas, nos llama la cantante y nos dice que vayamos a la pista que nuestros amigos nos habían preparado una sorpresa. Fuimos pensando que nos habían liado una de estas de hacernos bailar en el medio mientras nos rodeaban, vaya mierda! Y de repente empezaron a tocar la de “I got a feeling” de Black Eyed Peas, que me encanta y es mi tono de móvil desde que salió, nos dimos la vuelta y los vimos a todos formando filas y bailando!!! ALUCINABAMOS!!! Momentazo donde los haya!


Y una de las cosas que más nos flipó fue la mezcla de gente que había bailando, había amigos míos, amigos de Miguel, amigos de los dos y familia y habían estado quedando para ensayar!!! Una pasada! Esto no se nos va a olvidar NUNCA!!!


Y seguimos bailando un poco de todo…


YMCA... qué bueno Miguel bailando con Santi como si fuera una marioneta!


Y fin de fiesta en el restaurante...


A las 20h teníamos que dejar el restaurante y habíamos cogido la post boda en el Café Irún, esta vez los buses llevaban media hora fuera, menos mal, pero se nos acercó uno de los conductores a preguntarnos a ver dónde tenían que ir, porque les habían dicho mal la hora otra vez y a un conductor le habían dicho que al Café Irún y al otro que al Truk ¿?, sin comentarios…


Y con el Café Irún triunfamos!! Qué a gusto se estaba en la terraza!! Sacaron pintxos y seguimos bailando.



A las 10 se fue un bus con casi toda la gente mayor y los demás seguimos a lo nuestro.



Hubo un bis del baile y tengo que decir que esta vez les quedó mejor todavía, claro, ahora ya no les temblaban las piernas y estaban “ligeramente” más entonados :) Creo que viendo estas fotos, todos entenderéis por qué tengo la imagen grabada de Josema, Oscar y Unai dándolo todo!


Y a la 1, ya se iban los últimos buses, fuimos avisando a la gente y unos pocos se quedaron, pero casi todos se fueron. Cuando los montamos a todos en los buses, cogimos a Jhonny y a Rosy, que dormían en nuestra casa y ala!, que ya era hora y estábamos reventados.


20 horas después de que me sonase el despertador, nos estábamos metiendo en la cama diciendo que si llegamos a saber que nos lo íbamos a pasar tan bien, nos habríamos casado antes! jajaja.


Disfrutamos de todo y de todos, de cada momento del día, nos reímos un montón y nos encantó todo!! Muchas gracias a todos por hacernos pasar un día tan guay, sin duda, un día para recordar!


Y ahora os animo a que escribáis en los comentarios cuál fue vuestro mejor momento del día, el mejor recuerdo, vuestra versión o lo que queráis ;)


Si alguien no se ve en las fotos es porque todavía no me ha pasado las de su cámara, así que ¿a qué espera?, jajaja.


Y os recuerdo que si clickais en Julio, podéis leer el viaje de novios :)